Algunas películas (muy) antiguas
Las películas vistas en clase constituyen los primeros intentos que se hicieron para contar una historia a través de imágenes en movimiento.
Actualmente,
estos filmes podrían parecernos aburridos, lentos o “sin chiste”, pues estamos
acostumbrados a grandes despliegues de efectos especiales que, cada vez más,
van dejando de impresionarnos por la misma costumbre y la insistencia con la
que se nos presentan.
Pero debemos ponernos a pensar que, en aquella época, las películas eran algo para sorprenderse. Tan solo el hecho de ver personas y cosas moviéndose igual que en la “vida real” pero sin que estuvieran realmente presentes significaba algo fuera de lo normal y difícil de creer. Como ejemplo de esto tenemos “La llegada del tren a la estación” de los hermanos Lumière, que provocó reacciones de pánico entre los espectadores que la vieron por primera vez y que pensaron que el tren de la pantalla realmente venía hacia ellos dispuesto a atropellarlos.
Ya ni hablar de la películas de Georges Méliès (Viaje a la luna, La retorta infernal) que utilizaban primitivos pero impresionantes y efectivos efectos especiales. A través de estos filmes, la gente podía ver vueltos a la realidad sus sueños más inverosímiles, como viajar a nuestro satélite natural y conocer a sus habitantes o ver a una serpiente transformarse en diversos personajes.
“El gran robo del tren” y “La muchacha confiada” son ejemplos de las primeras películas de acción y de suspenso con una historia bien estructurada.
Al ver todas estas películas también pude darme cuenta de qué tan importante es la música dentro de ellas para crear la atmósfera, el sentimiento y la reacción que se deseen provocar en el espectador. Con esto pude ver que muchas veces, aunque no haya palabras, aún puede haber comunicación.
Creo que a estos primeros directores cinematográficos les debemos todo lo que vemos hoy en día en el cine pues la mayoría de aquellos trucos rudimentarios que utilizaron en sus películas son usados, con algunas variaciones, en los filmes actuales. Gracias al ingenio, creatividad e imaginación de directores como los Lumière, Méliès, Porter y Griffith, ya no existe hoy ningún lugar que no podamos conocer ni ningún sueño que no podamos realizar.
Es curioso pensar que cuando vi estas películas en clase, YouTube todavía no existía, pero ahora es posible encontrarlas todas en esa plataforma, e incluso con diferentes versiones, pues además de las originales, están las restauradas que se pueden disfrutar en HD, 4K y hasta a color. Y reflexionando un poco más sobre esto, y completando la idea final del texto que escribí en aquella ocasión para mi tarea, es cierto que hoy ya no hay lugares que no podamos conocer o sueños que no podamos realizar, pero ahora además lo podemos hacer en cualquier momento, estando en cualquier lugar y desde la palma de nuestras manos.
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